Titanio. Lo eterno
El titanio posee propiedades fuera de lo común: tan resistente como el acero y dos veces más que el aluminio, no es sujeto a corrosión, es ligero, dúctil, fácil de trabajar y biocompatible. La película delgada de óxido que lo protege es muy estable en cualquier entorno, y esto lo vuelve eterno. Su naturaleza carismática es exaltada por nuestra elaboración especial: gracias a la distinta interferencia de la luz en la superficie, el titanio cambia de color, así que lo volvemos único y atractivo por su belleza cambiante.